
Es seguro que más de una vez has escuchado, sobre todo en los últimos meses, que el Banco de México ha aumentado o reducido la tasa de interés. Muchas personas, sin embargo, no saben bien a qué se refiere esto y qué implicancias tiene ese tipo de decisiones en la economía. Vamos a aclarar algunos términos referidos a la tasa de interés bancario para despejar tus dudas.
El precio que tiene el dinero
El negocio de los bancos y de las entidades financieras está determinado por la tasa de interés, que es aquel porcentaje que se aplica sobre el dinero disponible en el mercado. Básicamente, estas instituciones pagan un interés, denominado pasivo, para los depósitos de los ahorristas, y cobran un interés, llamado activo, para los préstamos que otorgan. Por ende, la tasa de interés es el precio que tiene el dinero.
Determinando el valor de la tasa de interés
La tasa de interés bancaria varía su valor de acuerdo a la ley de la oferta y la demanda. Así, este porcentaje se determina tomando en cuenta la demanda de fondos por parte de quienes necesitan dinero; cuando la oferta de fondos aumenta, es decir, cuando es más fácil conseguir el dinero en el mercado, la tasa de interés baja, mientras que cuando no hay suficiente dinero para prestar o la demanda por éste aumenta, la tasa de interés sube.
El efecto de la tasa de interés sobre la economía
A nivel macroeconómico, la tasa de interés tiene un efecto fundamental sobre el crecimiento y la inflación. Si la tasa de interés es baja el consumo aumenta debido al, relativamente, fácil acceso que tienen las personas al dinero. Debido a ello se genera crecimiento económico. Sin embargo, por ese efecto, es probable que también se genere inflación. De ahí, que el Banco Central la mantenga alta para impulsar el ahorro y evitar una tendencia inflacionaria.
El control por parte del Banco de México
Por el contrario, si la tasa de interés se mantiene alta las personas dejan de consumir productos por lo cual se detiene la inflación. En este escenario la tendencia es a generar ahorro debido a que endeudarse es muy costoso. El problema es que, al dejar de consumir, el crecimiento económico del país se detiene. Por ello, El Banco de México utiliza la tasa de interés para mantener el control de la economía, aumentándola cuando quiere frenar la inflación y bajándola por si se presenta un escenario de recesión.
En resumen, el monto adicional que cobran las entidades financieras por un dinero que le pedimos prestado para adquirir un bien o realizar alguna inversión es denominado tasa de interés. Esta tasa de interés está determinada por la ley de la oferta y la demanda; sin embargo, otros actores como el gobierno con su política fiscal y monetaria también puede influir en su variación. Al tener un efecto directo sobre la economía del país, es preciso que el Banco de México mantenga en un adecuado nivel la tasa de interés a fin de evitar problemas inflacionarios.