
Una organización no está sola en el mercado, es parte de un ecosistema en el que interactúan otras empresas, individuos y entidades. En ese sentido, tanto los factores internos que afectan a una empresa, propios de cada negocio, como los que se generan de manera externa, influyen en sus resultados. Existe una herramienta muy útil que nos permite monitorear todo el entorno; la matriz FODA. El análisis FODA no es más que el estudio detallado de las Fortalezas y Debilidades que tiene el negocio, es decir, la parte interna; y de las Oportunidades y Amenazas que se le presentan en el entorno, con el fin de identificarlas y hacerles frente. Veámoslo más al detalle.
Fortalezas
Es un aspecto interno de la empresa y se refiere a todos aquellos puntos a favor que tiene ésta y que le permiten lograr diferenciarse de la competencia. La experiencia en el sector, una sólida estructura financiera, un equipo de trabajo cohesionado o el desarrollo de un producto muy demandado son algunas de las fortalezas que podemos encontrar en un negocio. Es importante identificar todos aquellos puntos fuertes que tiene la organización para lograr potenciarlos y sacarles el máximo provecho ante cualquier amenaza externa. Por lo general, las fortalezas pueden ser controladas y mejoradas por la propia empresa, ya que es un factor que depende de la misma.
Debilidades
Al igual que las fortalezas, las debilidades también son factores que encontramos dentro de la organización, y están referidas a los puntos flojos que debe mejorar. Falta de conocimientos en el personal, inadecuada inversión en maquinarias o tecnología, equipos desmotivados o deficiencias en la producción son ejemplos de las debilidades que podemos encontrar. El identificar las debilidades en nuestra propia organización nos permite conocer de qué pie cojeamos y en qué áreas o zonas somos vulnerables ante la competencia con la finalidad de poner nuestra atención en esas falencias y convertirlas en fortalezas.
Oportunidades
A diferencia de las anteriores, las oportunidades pertenecen a los factores externos que encontramos en el entorno de la organización. Son referidas a la identificación de circunstancias en el mercado que son favorables para el crecimiento de nuestro negocio. Entre algunos ejemplos de oportunidades que podemos encontrar están las decisiones políticas favorables, el retiro del mercado de algún competidor, recibir una opción de compra de materia prima a menor costo o tendencias nuevas en el consumo. Las oportunidades son factores que no podemos controlar porque no dependen de nosotros, pero si podemos identificar para sacarles el máximo provecho.
Amenazas
También es parte de los factores externos que afectan a una empresa, que aunque no podamos controlar, es indispensable identificar a tiempo. Las amenazas son circunstancias que pueden afectar el normal desarrollo de nuestras operaciones o que pueden alterar desfavorablemente nuestro desempeño en el mercado. El ingreso de una nueva empresa competidora, condiciones climáticas desfavorables o fusiones entre competidores para ampliar su presencia en el mercado y disminuir la nuestra, son ejemplos claros de amenazas que se presentan todo el tiempo; identificarlas a tiempo es un factor clave para estar prevenidos.
Una revisión y análisis de estos cuatro aspectos conforman la matriz FODA; es conveniente realizarla y monitorearla siempre, con el fin de lograr una presencia sólida en el mercado.