
Emprender actualmente tiene importantes ventajas en comparación hacia algunos años atrás; iniciando por los trámites, pues ya se puede realizar el registro de una empresa en un solo día y sin ningún costo, todo directamente desde un portal de la Secretaría de Economía.
Con esa rapidez, podrías comenzar a ganar tiempo y dinero que antes se iba en el arranque burocrático. Nada mejor que empezar tu negocio con una visión de ahorro y administración óptima de recursos durante los primeros meses.
Financiarte a través de un préstamo bancario o por medio de una financiera, también puede ser una herramienta útil para las empresas que van iniciando. Tener liquidez inmediata para cosas urgentes, puede impulsar o acelerar el negocio mientras se obtienen ganancias, o alguna otra fuente de capital.
Hay situaciones específicas dentro del crecimiento de una nueva empresa que idealmente pueden ser cubiertas con algún préstamo bancario, inmediato o personal. Aquí te damos 4 ejemplos:
#1 Pago a proveedores
Arrancar pagando a tus proveedores puede ser un poco abrumador, mucho más si se trata de cantidades importantes. Puede el periodo entre que llegan los ingresos y se necesitan sea corto, si no tienes dinero, algunos proveedores pueden entenderlo y hasta darte plazos, pero otros no.
Un préstamo puede hacer la diferencia para asegurar las ganancias. Recuerda, montos más pequeños pueden salir de una financiera, para cantidades mayores, cotiza en banco.
Nunca olvides el plazo de pago de tu préstamo y no pidas más de lo que puedes pagar.
#2 Compras
Con la ayuda de un préstamo también puedes comprar diferentes activos de un solo golpe o poco a poco; desde maquinaria, mobiliario, o algún elemento que haga falta para que el negocio pueda avanzar de inmediato. Quizá requieras préstamos más grandes, pero analiza si vale la pena, ya que una buena inversión podría acelerar tus ganancias.
#3 Crecimiento para la rentabilidad de la empresa
Para el crecimiento y soporte del negocio es necesario tener un capital de respaldo, es decir, dinero que permita que el trabajo se haga sin que falte ningún elemento.
Un préstamo puede ser parte de ese soporte financiero, en conjunto con el capital que tengas. Además podrás hacer movimientos estratégicos con el dinero.
#4 Transformación de la empresa
Si por el contrario, ya tienes un negocio armado y lo que buscas es avanzar hacia una transformación, un préstamo también puede ser un buen camino.
Incluso existen préstamos gubernamentales que te ayudan a la renovación de tu empresa en un día en México.
Recuerda que un préstamo puede ser una gran alternativa para que un negocio o empresa crezcan, SOLO si lo usas como un soporte en algunas situaciones que impulsen a la empresa; no olvides el compromiso que implica tener dinero prestado (con intereses) y la responsabilidad que implica cualquier crédito.
Por: ComparaGuru.com