
Designada por la UNESCO como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad en el año 2010, la comida típica mexicana está compuesta por una vasta cantidad de potajes provenientes de cada una de las regiones distribuidas a lo largo y ancho de nuestro país. Todos estos platos son tan particulares en cuanto a sus ingredientes y a su forma de preparación que son muy apreciados en el mundo entero. Vamos a conocer de qué están compuestos y de dónde provienen algunos de estos deliciosos platillos de comida mexicana típica.
Los Chiles en Nogada
Proveniente del estado de Puebla, los Chiles en Nogada – en plural – es uno de los platillos más representativos de la gastronomía típica mexicana. Es preparado con chile poblano relleno de un guiso de carnes de res y puerco, mezclado con frutas como la manzana, el plátano y el durazno, y cubierto con una crema de nueces, granada y perejil, representando los colores de la bandera de México. Es un potaje muy valorado a nivel internacional y su preparación es común entre los meses de julio y octubre ya que es la época de la cosecha de las nueces de castilla, ingrediente principal de la Nogada. Es considerado el platillo poblano por excelencia.
El Pozole
Si bien este delicioso platillo mexicano proviene del estado de Jalisco, en otras regiones existen distintas versiones para este típico potaje nacional. Básicamente, es un caldo preparado con granos de un maíz llamado cacahuazintle, carne de cerdo y chile. De acuerdo a la región, se puede preparar blanco o condimentado. El pozole blanco o verde es muy común en el estado de Guerrero y se caracteriza por servirse acompañado de salsas rojas, a base de jitomate; o verdes, a base de tomate verde. El pozole rojo o condimentado es una comida típica de Nayarit, Sinaloa, Guanajuato y Jalisco, y se diferencia del blanco en que es condimentado durante su cocción. En ambas versiones se sirve acompañado de algunos vegetales como lechuga, col y cebolla.
Cochinita Pibil
Este clásico y delicioso guiso de puerco marinado, propio del estado de Yucatán, es una mezcla de sabores y sensaciones. Es preparado con una salsa a base de chile y achiote con la cual se marina la carne de puerco y se hornea en un hoyo en la tierra cubierto con hojas de plátano y aguacate; técnica de origen prehispánico conocida como pibil, por la palabra maya “pib” que significa “horneado en”. Se sirve acompañado de cebolla morada y una salsa preparada con naranja agria y chile habanero. La forma particular de preparación y su mezcla de ingredientes hacen que sea uno de los platos más deliciosos e imprescindibles de probar de la cocina mexicana.
Estos son solo tres de los muchos platillos deliciosos que México tiene para ofrecer a los turistas, nacionales y extranjeros, ávidos por vivir una deliciosa experiencia culinaria. Si vas de visita a alguno de estos lugares, aprovecha y pruébalos; practicar el turismo gastronómico en todas las regiones de nuestro país es una excelente forma de conocer y valorar nuestra cultura y diversidad.
Si eres fan de la comida, no olvides leer otros posts como el de marcas de comida o otro que habla sobre restaurantes de comida mexicana en México DF.